martes, mayo 22, 2012

Al inicio de la Conquista, los indígenas creían que jinete y caballo era  un solo ser.

lunes, mayo 21, 2012

SUPERSTICION Y COLONIAJE



Por Clovis Díaz

La Paz, mayo 2012. (EL DIARIO).-Han transcurrido más de quinientos años desde la incursión colonial española al entonces Nuevo Mundo y aún siguen en pie misterios que deambulan por América. Uno de ellos, tal vez el más importante: ¿cómo fue posible que miles de indígenas hayan sido derrotados por un puñado de europeos?  Aislando el impacto de las armas de fuego, surge un factor sicológico que tal vez, podría develar aquel misterio: el papel desempeñado por la superstición y creencias indígenas en toda América Latina.
En efecto. Desde México al Perú, las comunidades autóctonas esperaban el retorno de dioses resplandecientes, blancos y barbudos. La leyenda, con sutiles diferencias,  había sido transmitida de generación en generación; de comunidad en comunidad de manera que, en 1519, aquella visión ideal adquirió imagen y masa corpórea  con la presencia física de Hernán Cortés y sus hombres, que desembarcaron en el puerto de Veracruz y sin mayores inconvenientes (exceptuando “La Noche Triste”), tomaron México.
Otro tanto ocurrió en el Perú ---1532---  con la derrota de los incas por las fuerzas de Francisco Pizarro y los hermanos Almagro; descalabro de gran magnitud que alcanzó a las comunidades originarias del Tahuantinsuyo, incluido el Kollasuyo, hoy región occidental de Bolivia.
Junto a los ejércitos españoles, ingresó un grupo especializado en difundir y defender la fe. Los batallones de la sotana y de la cruz. Sin embargo, entre los extirpadores  de idolatrías, hubo sacerdotes que al redactar minuciosos informes a la Corona Española, difundieron la Historia de los pueblos sometidos al proceso colonial, salvando en última instancia, tan valiosa información que en nuestros días es motivo de consulta.
Así, Fray Diego de Landa, describió las costumbres de los mayas, en su libro “Relación de las Cosas de Yucatán”, y mencionó la leyenda indígena de los “hombres resplandecientes, barbados y de tez blanca” que algún día, retornarían en pos de su trono.

MALOS PRESAGIOS

A propósito, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), conmemoró el Quinto Centenario del Encuentro de Dos Mundos, en 1992, publicando la decimotercera edición del libro de Miguel León-Portilla, “Visión de los vencidos, Relaciones Indígenas de la Conquista”.

León-Portilla destaca en su famoso libro, el proyecto de Fray Bernardino de Sahagún, sacerdote que convocó a sus estudiantes indígenas de Tlatelolco, México,  para que redactaran en idioma náhuatl y de acuerdo a su punto de vista, la más amplia relación de la dramática incursión española. 

Los estudiantes indígenas, hablan de ocho funestos “Presagios de la venida de los españoles”, que por su importancia y como respaldo al presente  artículo “Superstición y Coloniaje”, reproducimos a continuación: “Primer presagio funesto: Diez años antes de venir los españoles primeramente se mostró un funesto presagio en el cielo. Una como espiga  de fuego, una como llama de fuego, un como aurora: se mostraba como si estuviera goteando, como si estuviera  punzando en el cielo (…) pues cuando se mostraba había alboroto general: se daban palmadas en los labios las gentes, había un gran azoro…”.

El segundo presagio funesto, cuenta que “por su propia cuenta se abrasó en llamas; se prendió en fuego: nadie tal vez le puso fuego, sino por su espontánea acción ardió la casa de Huitzilopochtli. Se llamaba su sitio divino…”Casa de Mando”… pero cuando le echaban agua, cuando intentaban apagarla, sólo se enardecía flameando más. No pudo apagarse: del todo ardió”.

El tercer presagio funesto, narra que un rayo cayó sobre un templo: “Sólo de paja era: no llovía recio, solo lloviznaba levemente. Así se tuvo por presagio; decían de este modo: “No más fue golpe de Sol”. Tampoco se oyó el trueno”.

Cuarto presagio funesto: “Cuando había aún Sol, cayó un fuego. En tres partes dividido: salió de donde el Sol se mete: iba derecho viendo a donde sale el Sol: como si fuera brasa, iba cayendo en lluvia de chispas. Larga se tendió su cauda, lejos llegó su cola…”

Quinto presagio funesto: “Hirvió el agua: el viento la hizo alborotarse hirviendo…se levantó muy alto. Llegó a los fundamentos de las casas: y derruidas las casas se anegaron en agua. Eso fue en la laguna  que está junto a nosotros”.

Sexto presagio funesto: “muchas veces se oía: una mujer  lloraba, iba gritando  por la noche; andaba  dando grandes gritos: ---¡Hijitos míos, pues ya tenemos que irnos lejos! Y, a veces decía:-- ¿Hijitos míos, adónde os llevaré?”

Séptimo presagio funesto: “Muchas veces se atrapaba , se cogía algo en las redes. Los que trabajaban en el agua cogieron cierto pájaro ceniciento, como si fuera grulla. Luego lo llevaron a mostrar a Moctezuma, en la Casa de lo Negro (casa de estudio mágico)…Había uno como espejo en la cabeza del pájaro como rodaja de uso, en espiral y en rejuego, era como si estuviera perforado en su medianía. Allí se veía el cielo. Las estrellas… y Moctezuma lo tuvo a muy mal presagio (…) Pero cuando vio por segunda vez la cabeza del pájaro, nuevamente vio allá en lontananza, como si algunas personas vinieran de prisa; bien estiradas; dando empellones. Se hacían la guerra unos a otros y los traían a cuestas unos como venados…”

Octavo presagio funesto: “Muchas veces se mostraban a la gente hombres deformes, personas monstruosas. De dos cabezas pero un solo cuerpo. Las llevaban a la Casas de lo Negro, se las mostraban a Moctezuma. Cuando las había visto luego desaparecían”.

MUERTE DE
MOCTEZUMA

Los informantes de Sahagún, describen luego el encuentro de Moctezuma (Motecuhzoma), con Hernán Cortés: “Cuando él (Moctezuma), hubo terminado de dar collares a cada uno, dijo Cortés a Moctezuma: ---¿Acaso eres tú ¿Es que ya eres?¿Es verdad que eres tú Moctezuma? Le dijo Moctezuma:---Si, soy yo. Inmediatamente se pone en pie, se para para recibirlo; se acerca a él y se inclina, cuanto puede dobla la cabeza; así lo arenga, le dijo: “Señor nuestro: te has fatigado; te has dado cansancio: ya a la tierra tú has llegado. Has arribado a tu ciudad: México. Aquí has venido a sentarte en tu solio, en tu trono. Oh, por tiempo breve te lo reservaron, te lo conservaron, los que ya se fueron, tus sustitutos (…) Ojalá uno de ellos estuviera viendo, viera con asombro lo que yo veo venir en mí! (…) Y tú has venido entre nubes, entre nieblas. Como que esto era lo que nos habían dejado dicho los reyes, los que rigieron, los que gobernaron tu ciudad: que habrías de instalarte en tu asiento; que habrías de venir acá (…) Llega a la tierra: ven y descansa, toma posesión de tus casas reales…”

Aprovechando el carácter pacífico del encuentro con el emperador mexicano, los españoles hicieron  prisionero a Moctezuma y lo ejecutaron.

DIOS VIRACOCHA
ENTRE LOS INCAS

En 1959, en homenaje a los trescientos cincuenta años de “Los Comentarios Reales”, obra escrita por el Inca Garcilazo de la Vega, la Universidad Nacional de San Marcos, Lima, Perú, editó los “comentarios” en dos tomos.  Garcilazo de la Vega, relata que uno de los hijos del Inca Yáhuar Huácac, soñó con un fantasma que anunciaba la rebelión de los Chancas.

El joven príncipe, se presentó ante su padre Yáhuar Huácac y le comunicó su sueño: “---Sabrás que estando yo recostado hoy a mediodía, debajo de una gran peña, se me puso delante un hombre extraño en hábito y en figura diferente de la nuestra, porque tenía barbas en la cara de más de un palmo y el vestido largo y suelto que le cubría hasta los pies. El cual me dijo: sobrino, yo soy hijo del Sol; por lo cual soy hermano de tu padre y de todos vosotros. Llámome Viracocha Inca; vengo a darte aviso se lo des al Inca, que la mayor parte de las provincias  de Chinchasuyu están rebeladas y juntan mucha gente para derribarle y destruir nuestra imperial ciudad del Cusco (…) y en particular te digo a ti que en cualquier adversidad  que te suceda no temas que yo te falte…” Garcilazo, agrega que tiempo después, cómo el joven príncipe descendiente de Yáhuar Huácac, al combatir y destruir  a los ejércitos rebeldes, tomó el nombre de Viracocha Inca.

A la llegada de los españoles al suelo peruano, los indígenas, los identificaron con el dios Viracocha, porque les vieron barbas y todo el cuerpo vestido.  Luego que entraron los españoles prendieron a Atahuallpa y lo mataron “Y porque creyeron que eran hijos de su dios, los respetaron tanto que los adoraron y les hicieron tan poca defensa como se verá en la conquista del reino, pues seis españoles solos (Hernando de Soto y Pedro del Barco entre ellos), se atrevieron a ir desde Cajamarca al Cusco y otras partes, doscientas y trescientas leguas de camino, a ver las riquezas de aquella ciudad y de otras, y los llevaron (los indios), en andas, porque fuesen más regalados…” agrega Garcilazo.

Citemos que en la parte occidental de Bolivia, aún en nuestros días se escucha tratar de “viracocha” a gente de las ciudades. 

EL FACTOR SICOLÓGICO
ANULA A LOS NATIVOS

En base a testimonios de los discípulos indígenas de Fray Bernardino Sahagún,  que confirman el carácter sobrenatural dado a los soldados españoles que invadieron México (1519), y tomando la versión del Inca Garcilazo de la Vega, en la conquista del Perú (1532), es notorio el papel negativo que jugaron  la superstición y las creencias de estas dos naciones precolombinas, unidas por el dolor de la Conquista que cercenó no sólo la vida de los vencidos, sino que también generó un freno absoluto al desarrollo de las dos culturas.

En mejores términos, el factor sicológico que atrapó el espíritu y el entendimiento de Moctezuma, en México y neutralizó el ánimo guerrero de  Atahuallpa y su gente, en el Perú y otras latitudes andinas, hizo posible que un puñado de españoles, tenga ganada la guerra militar aún antes de empezarla.

ARCABUZ , ESPADA,
CABALLO Y MASTINES

El espanto causado en el ánimo de clase dirigente y la  masa indígena, ante la atrevida incursión de los “hombres resplandecientes, barbados y de tez blanca”, fue acrecentado por el impacto de las armas blancas de acero, el terrible cañón, el mortal arcabuz, la feroz  jauría de mastines y el brioso caballo que atropellaba sin contemplación alguna.

La bestia de poderosos cascos y el jinete, fueron para los nativos un solo ser. Cuando comprobaron,  mucho después, que ambos morían bajo el poder de las flechas y de las emboscadas, era demasiado tarde para volver a los heroicos tiempos prehispánicos.

Desde nuestro moderno punto de vista, los españoles utilizaron una especie de operaciones sicológicas contra los indígenas, incluyendo entre los artefactos a su servicio, las enormes naves que flotaban en el mar, lagos y ríos de América Latina.

Vale destacar que la superstición y ciertas creencias fueron traídas también por los soldados de la vieja España. Tal es el caso del famoso aliado de las batallas: Santiago que ya combatió victoriosamente en las guerras santas contra los infieles y en el caso particular del Perú, contra  las montoneras indígenas leales a Tupac Amaru en 1780.

En la obra de Teresa Gisbert “Iconografía y mitos indígenas en el arte” publicado el año 2004, Santiago cayendo como un bólido del cielo, montado en su fogoso caballo, “lucha contra los indios” en un lienzo existente en la Iglesia de Pujiura, Perú.

 A su vez, este santo de procedencia colonial española, ha sido relacionado por los pueblos de habla aymara y quechua en el área andina de Bolivia,  como “Illapa” dios del rayo y del estruendo,  tal cual lo refrenda el autor del libro  “Mama Pacha”, Mario Montaño Aragón.

Para concluir, superstición y coloniaje han caminado de la mano, en la historia de nuestro país. (clovisdíaz@yahoo.es).


viernes, mayo 11, 2012

LA INDEPENDENCIA DE LOS MOVIMIENTOS SOCIALES EN BOLIVIA

Por Clovis Díaz.-
La Paz.- (EL DIARIO).-    Los movimientos sociales en Bolivia, son grupos heterogéneos  que a partir de la década de los años 70 del pasado Siglo, fueron ocupando parte del vacío sindical dejado por la desmovilización forzosa del proletariado minero; por  la debilidad de otras organizaciones de trabajadores y ante el primer desmoronamiento del sistema de partidos políticos.

Son grupos relativamente politizados, sin líderes ni caudillos conocidos. No están encuadrados en una determinada corriente ideológica y tienen la virtud de concentrarse y desconcentrarse rápidamente,  como se verá a lo largo de la presente investigación.

El golpe de Estado del entonces coronel Hugo Bánzer Suárez, iniciado entre el 19 y 21 de agosto de 1971, había exiliado a los partidos que meses atrás, reunidos en la Asamblea Popular, intentaban un gobierno de corte socialista.

El cruento golpe civil-militar, fue apoyado por dos tiendas antagónicas: El MNR dirigido por Víctor Paz y Falange Socialista, liderado por Mario Gutierrez Gutierrez. Dos enemigos mortales, enfrentados desde el 9 de abril de 1952, hicieron las paces. La tendencia militar había triunfado y Bánzer, líder de las Fuerzas Armadas consolidó su gobierno hasta el año 1979.

En aquel lapso de tiempo, todos los derechos habían sido conculcados. Miles de personas buscaron seguridad en los países vecinos, ante la avasalladora fuerza de la dictadura. Sólo estaban vigentes los partidos golpistas y algunas organizaciones nacidas al calor de los intereses cívico-militares, entre ellas, sin duda alguna, el Pacto Militar-Campesino, roto más tarde por contradicciones irreconciliables en ambos bandos.

En el exterior del país, en calidad de fugitivos y exilados, ciudadanos bolivianos; intelectuales, dirigentes de partidos de izquierda; líderes obreros y campesinos trataron de formar una resistencia organizada que sólo funcionó en los niveles de la propaganda política porque, en los hechos, sus diferencias ideológicas, trasladadas fuera de las fronteras bolivianas, impedían cualquier unidad y mucho menos el retorno al territorio boliviano para combatir la dictadura.

El exilio, generó también un profundo vacío en las organizaciones laborales de las ciudades y del área rural. Vacío que fue llenado de inmediato por grupos adictos a Bánzer, mientras que en el seno del gobierno, cundía la división en el MNR, a tal punto que Víctor Paz, rechazado por sus propios dirigentes medios, halló asilo en Lima, Perú. En el fondo, comenzaba el debilitamiento paulatino de las dictaduras militares no sólo en Bolivia, sino en toda América Latina.

En ese punto de inflexión, situaríamos el avance de algunos grupos  sociales que, ante la ausencia de organizaciones laborales, campesinas y de partidos políticos, fueron creando cuerpo. Cuando fue  derrotada la dictadura  de Bánzer, afloró ese  tipo de organizaciones.  El nuevo gobierno de Hernán Siles Zuazo (MNRI), aliado con el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) y el Partido Comunista de Bolivia (PCB), recibió el apoyo de los sectores populares, pero no por mucho tiempo.

La frágil economía boliviana, acentuada por una hiperinflación que rebasó el 25 mil por ciento de la pérdida adquisitiva del peso boliviano; la caída vertical de los precios internacionales del estaño y de otras materias primas exportables, generó un estado de convulsión extremo. Más de 10 mil mineros, provenientes de las minas nacionalizadas en quiebra, llegaron a la ciudad de La Paz y la sitiaron.

Siles estaba sentenciado y desde el Parlamento, acortaron su mandato.  En la oposición, operaban desde el Palacio Legislativo, el MNR de Victor Paz y Acción Democrática Nacionalista (ADN), partido fundado por el General Hugo Bánzer.

En 1985, Víctor Paz Estenssoro asumió nuevamente la presidencia de la República y de inmediato lanzó el Decreto 21060, por el que “relocalizó” (despidió), de sus fuentes de trabajo a miles de mineros y trabajadores de las minas nacionalizadas. La Central Obrera Boliviana, las federaciones campesinas, los sindicatos del Magisterio y organizaciones laborales, fueron diezmadas. Fenómeno político que marcaría definitivamente, la creciente debilidad de las instituciones obreras y campesinas hasta nuestros días.

EL REINADO DE LOS
MOVIMIENTOS SOCIALES

Al ingresar a los primeros años del Siglo Veintiuno, los grupos poblaciones del campo y la ciudad, hicieron de vanguardia en los enfrentamientos callejeros contra gobiernos de corte democrático. Levantaron cada vez con mayor fuerza y éxito, el estandarte de la sublevación  como ocurriera en la “Guerra del Agua, en Cochabamba y luego, en Octubre 2003, en las ciudades de El Alto y de La Paz. Amotinamiento civil que culminó con la renuncia del mandatario Gonzalo Sánchez de Lozada.

La Central Obrera Boliviana (COB), la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB), la Confederación Sindical Unica de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), y otras federaciones que heredaron el desgaste de las décadas pasadas, actuaron  prácticamente en la retaguardia de las grandes movilizaciones sociales de última generación, siguiendo y apoyando a los movimientos sociales que, sin pertenecer a una clase definida o más bien, integrados por gente de todas las clases sociales, dirigía las acciones contra determinadas instancias y pertenencias del Estado.

Podemos afirmar, que la primera década del Siglo Veintiuno, perteneció a la inventiva y accionar de los movimientos sociales.

Los “movimientos sociales” muestran en la práctica diaria su espíritu independiente, reacio a  compromisos y  alianzas políticas que no respondan en última instancia, a sus intereses. Actúan casi siempre, impulsados en nombre de reivindicaciones concretas.

Una vez que han logrado sus objetivos, retornan a la calma y se difuminan en estado latente, hasta que sale a la superficie una nuevo reto que combatir, no importando quién esté al frente, sea aliado o enemigo potencial.

ANALISIS
ERRONEO

En la actualidad, ideólogos cercanos al indigenismo, erróneamente, afirman que los movimientos sociales constituyen la base social del proceso de cambio; que son la fuerza viva que sustenta al gobierno. Tesis que encuentra su antítesis precisamente, en el espíritu independiente, crítico  y caótico de los grupos sociales.

La tesis, habría tomado como centro del análisis, la premisa de que el líder del proceso de cambio, obtuvo seguidas victorias en los eventos electorales, incluido un referéndum revocatorio con el voto de los movimientos sociales y que por lo tanto, éstos son, naturalmente, la base social y estable  del proyecto.

Enfoque irreal, que habría olvidado, tal vez, la mutabilidad constante de los movimientos sociales.

La tesis oficial, respondería más bien a un análisis estático que no habría considerado el cambio como único factor permanente. Al decir cambio, decimos avance, desarrollo, ruptura.

Si bien es cierto que el gobierno es apoyado por otros movimientos sociales, cuyos intereses aún no han entrado en contradicción con el Palacio Quemado; la tendencia sugiere más temprano que tarde, una posible  “bifurcación”  entre ambas partes.

En ese marco dialéctico, citemos como experiencia los violentos sucesos de Octubre 2003, cuando los movimientos sociales, organizaciones laborales y de vecindarios,  buscaron un cambio (“Agenda de Octubre”), deponiendo al gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada;  anulando poco después,  a los sobrevivientes del antiguo sistema político: Mesa-Veltzé.

Hay indicios de que aquel impulso no habría culminado su ciclo en Octubre 2003, sino que estaría presente y activo  en la actual etapa de contradicciones, entre el gobierno del Movimiento Al Socialismo (MAS), y los movimientos sociales “disidentes”.

PUNTOS DE
RUPTURA

En realidad, los movimientos sociales no han dejado de operar jamás. Por ejemplo el paro cívico del departamento de  Potosí en agosto 2010 que, por su fortaleza consiguió movilizar al país, superando en expectativas a la desaparecida “media luna”. Causó deterioro interno en el MAS y desgastó al mismo gobierno. Félix González, gobernador de Potosí, dejó coyunturalmente su militancia para integrarse al paro. Lo mismo hicieron diputados potosinos del MAS.

Vale la pena comentar los eventos de diciembre 2010 nada casuales. Elevar el costo de los hidrocarburos fue fatal para el gobierno y diseñó un punto de inflexión caracterizado por la dramática  ruptura de la fascinación y encanto que hasta entonces unía a los movimientos sociales y organizaciones de clase, con el gobierno del Movimiento Al Socialismo.

El 26 de diciembre, día del “gasolinazo” (Decreto 748), se rompió la atracción que ejercía la imagen del primer mandatario en los grandes grupos populares. El Decreto, impactó en la economía de los  movimientos sociales;  descubrió la debilidad organizativa del MAS y tocó directamente al liderazgo del primer presidente indígena.

En una semana, cambió radicalmente la situación del  MAS, cuya militancia no apoyó  el gasolinazo. Fenómeno explicable porque el partido de gobierno, se  alimentaba hasta la firma del Decreto,  de los movimientos sociales. ¿Cómo podían apoyar al gobierno, si estos grupos humanos estaban en las calles, rechazando el gasolinazo?
Fue también un examen para el MAS, cuya estructura partidaria o no existía a nivel de un verdadero partido político o en su defecto, no pudo ser activada en defensa del gobierno porque, sus “militantes” sociales estaban protestando en las calles de pueblos y ciudades contra el reciente alza del costo de vida.
En la ciudad de El Alto, el Alcalde Edgar Patana (MAS), fue echado de su oficina, mientras la multitud exigía la derogación del “gasolinazo” y  la renuncia de todo el gobierno. El 30 de diciembre, sindicatos y cooperativas mineras de Oruro y Potosí, anunciaron que marcharían  hacia La Paz, hasta conseguir la derogatoria del “gasolinazo”, retrotrayendo imágenes de Octubre 2003.
La noche del viernes 31, horas antes de Año Nuevo, el primer mandatario,  obligado por las circunstancias derogó el Decreto 748, porque “mandaba obedeciendo al pueblo”.  Pese a ello, el efecto colateral del gasolinazo, repercutió de inmediato en la escasez de alimentos, factor que influyó en nuevas marchas y paros.

En la ciudad de Oruro durante los festejos cívicos del 10 de febrero 2011, una marcha convocada por la Central Obrera Departamental, logró que la comitiva oficial abandonara los homenajes cívicos. Días más tarde, otro mitin  popular salido de El Alto a la ciudad La Paz, planteó la renuncia de la nueva Ministra de Desarrollo, Teresa Morales.
METAMORFOSIS

La metamorfosis de los movimientos sociales, de subyugados a oponentes, alcanzó a las organizaciones laborales. La Central Obrera Boliviana que tenía de Secretario Ejecutivo a Pedro Montes, hombre fuerte del proceso de cambio postulado por el MAS, jugaba un papel neutral, hasta que la  presión interna de los sectores de la COB y el ataque desde las filas del oficialismo contra el propio Secretario Ejecutivo, volcaron las preferencias de Montes hacia los sectores que no comulgan con el oficialismo. El trascendental cambio de opinión de Montes, alineó a la COB a favor de  los movimientos sociales disidentes. Esa fue otra ruptura, que indudablemente, debilitó el proyecto del gobierno.

El viernes 18 de febrero 2011, la COB con su nueva indumentaria,  paralizó la sede de gobierno primero en rechazo a cualquier elevación del costo de pasajes en el servicio público; segundo, reclamando un salario justo ante la elevada inflación;  tercero, contra la escasez de alimentos y cuarto, exigiendo la renuncia de los principales ejecutivos del gobierno.

Pero, las organizaciones obreras, no son las únicas respondonas. En el marco de esta  metamorfosis, el Consejo Nacional de Markas y Ayllus del Qollasuyo (CONAMAQ), organización de raigambre campesina, rechazó en julio pasado la sugerencia del gobierno de adquirir el excedente de coca producida en el Chapare, para  evitar que la hoja milenaria alimente a las fábricas de cocaína del narcotráfico.


TIPNIS


Los pobladores del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro-Sécure (TIPNIS), adscritos a la Confederación Indígena del Oriente Boliviano (CIDOB), otrora seguidores del MAS, constituyen otro valioso aporte a la tesis de que, los movimientos sociales son ante todo, independientes y que rompen sus ataduras políticas, si éstas no están en correspondencia a sus intereses económicos y culturales.
Como es de dominio público, treinta y cuatro comunidades y doce regiones que viven o dependen del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro-Sécure (TIPNIS), apoyados por la CIDOB y organizaciones indígenas del área amazónica de nuestro país, marchan para impedir la construcción de una carretera a San Ignacio de Moxos. La extensa zona selvática posee un millón 236 mil  hectáreas de fértil territorio, fue denominada “Parque Nacional Isiboro-Sécure”, en 1965. En 1990, logró el status de  Territorio Indígena.
En el presente análisis de investigación, dejamos el problema caminero para enfocar la profundidad del problema: la marcha del Tipnis, suma las contradicciones entre varios movimientos sociales y la política del gobierno boliviano.
En efecto. las nuevas contradicciones, han trasladado el conflicto social al Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS), y se hizo fuerte después que la Confederación de Pueblos Indígenas de Bolivia (CIDOB), anunciara que los pobladores de la región, apoyados por diversas etnias del oriente, marchan hacia la ciudad de La Paz, con el objeto de impedir la mencionada carretera.
El presidente de la CIDOB; Adolfo Chávez, dijo que esta organización podría pasarle la factura al gobierno, votando por el “NO”  en octubre, si no se detiene el proyecto caminero apoyado económicamente, en parte, por el gobierno de Brasil.

Después que el gobierno de Brasil  y su embajador en Bolivia, Marcel Fortuna Biato, sugirieran que la administración de Evo Morales  inicie diálogo con los indígenas opuestos a la construcción de la carretera, surgieron  posiciones muy duras que han impedido cualquier acercamiento.

¿Cómo se explica que otro movimiento social, esta vez del oriente boliviano, eche por la borda su alianza con el MAS?

Sin duda alguna, la CIDOB, de larga historia sindical y una de las primeras organizaciones  que introdujo en Bolivia, la marcha interdepartamental como forma de lucha reivindicativa; ya no pertenece al área de influencia del MAS.


MOVIMIENTOS
SOCIALES OPUESTOS

Hay otra figura que tal vez, repercuta en este conflicto a medida que los indígenas avanzan hacia la sede del gobierno y que necesariamente, deben transitar por el subtrópico de Cochabamba. Los marchistas del TIPNIS, calculan que su caminata hasta La Paz, duraría más de un mes. En ese período de tiempo, núcleos sociales pertenecientes  a la Seis Federaciones de Productores de Coca del Trópico de Cochabamba y  organizaciones femeninas cercanas a las “bartolinas”,  intentarían posiblemente neutralizar a  los caminantes del TIPNIS.
Por otra parte, la Confederación Sindical de Campesinos Interculturales de Bolivia (CSCIB), declaró públicamente su deseo por ocupar las  tierras del Parque. Esta  Confederación, podría desviar  la lucha de las comunidades que pueblan el TIPNIS y transformar el rechazo a la construcción de la carretera, en una lucha por la posesión de tierras del Parque Isiboro-Sécure.
Otro indicio del malestar emergente, es la disminución del grado de influencia de la Confederación Sindical Unica de Trabajadores Campesinos de Bolivia (CSUTCB), en los trabajadores rurales,  por su indiferencia ante los problemas que atañen a las etnias del oriente. La CSUTCB ha intercedido reiteradamente en favor del gobierno para desmovilizar la marcha del TIPNIS y  deslindó cualquier ligazón con el esfuerzo de los marchistas.
La organización opuesta y que podría suplantar a la CSUTCB o por lo menos atraer a los sectores campesinos, sería el CONAMAQ, que empieza a ocupar el vacío político de la Confederación Sindical Unica de Trabajadores Campesinos de Bolivia. El CONAMAQ, por su audacia y línea contestataria al gobierno, no sólo participa en la problemática del TIPNIS, sino que también, se posesiona como una entidad leal, por encima de cualquier convenio político, hacia la masa campesina e indígena.
 Mientras tanto, se han pronunciado con vehemencia dos estamentos: la  Federación de Juntas Vecinales (FEJUVE) de la ciudad de El Alto, que exige entre otras reivindicaciones la realización del Censo y la Central Obrera Boliviana (COB), que reclama el cumplimiento de ocho puntos. Los más importantes, son: reestructuración de la Caja Nacional de Salud,  respeto al fuero sindical, abrogación del decreto 21060 y cumplimiento del incremento salarial.
CONCLUSIONES
El impulso combativo y de cambio que levantó a miles de ciudadanos en las ciudades de El Alto y La Paz, en Octubre 2003, hasta lograr la renuncia del primer mandatario Gonzalo  Sánchez de Lozada, de sus aliados Manfred Reyes Villa y Jaime Paz Zamora y luego quitar el respaldo político a los sucesores Carlos Mesa y Rodriguez Veltzé, no fue agotado en aquella etapa de cruenta convulsión social.

Aquel ciclo no culminó el 2003 y parece estar presente en los ajetreos de los movimientos sociales que desde entonces hasta nuestros días izan la bandera de viejas y nuevas reivindicaciones.

Está planteado en el escenario nacional, la existencia objetiva de movimientos sociales “disidentes” que si en principio apoyaron al gobierno del MAS, hoy constituyen la fuerza primordial que se rebela contra quienes no cumplen la “agenda de Octubre”.

Estos movimientos disidentes, no son producto del trabajo de la oposición política, porque ésta deambula bajo los efectos demoledores de Octubre 2003. En efecto. La oposición no tiene un norte ni un programa alternativo. Su actividad se resume a intervenciones ocasionales de los parlamentarios asambleístas.

En cuanto a los movimientos sociales, que aún están bajo la influencia del MAS; podrían ser utilizados contra los movimientos sociales “disidentes”.  Sin embargo, esta posibilidad es cada día más remota por la característica principal de los movimientos oficialistas y disidentes: espíritu independiente y  tendencia a romper lazos políticos y alianzas, si sus intereses no son respetados o no son atendidos a tiempo. Así lo señala la experiencia que vivimos a lo largo y ancho de nuestro país.

Al concluir nuestra investigación sobre los movimientos sociales, debemos apuntar que, las organizaciones campesinas e indígenas, entre ellas la CSUTCB, sufren también los rigores impuestos por el levantamiento de Octubre 2003. No sería raro que, la Confederación Sindical Unica de Trabajadores Campesinos de Bolivia, pase de las manos del oficialismo a las manos del CONAMAQ, como sugieren las tendencias de cambio y reacomodo de fuerzas sociales (clovisdiaz@yahoo.es).-.


Artículo publicado en Agosto 2011. Por su contenido actual, lo edito nuevamente.-. 

lunes, mayo 07, 2012

LA REBELION DE LA CLASE MEDIA



Por Clovis Díaz


La Paz, MAYO 2012.- (EL DIARIO).-    Comentaristas  que auguran  un pletórico reinado del Estado Plurinacional y su gobierno, están sorprendidos por  la vorágine de la Clase Media que, en cuestión de semanas (marzo y abril 2012),  captó la vanguardia de diversos sectores sociales descontentos, se posicionó como posible alternativa de cambio y desvirtuó el análisis optimista de políticos y  militantes afines al indigenismo.

Recordemos que la  Clase media, hastiada del fracaso programático  de los viejos partidos políticos, votó  en masa por un gobierno de nuevo tipo, cuyo candidato visible fue Evo Morales Ayma.

Aquella trascendental decisión, habría sido revisada por el descontento y frustración de miles y miles de bolivianos del campo y la ciudad que, al no encontrar respuestas ni soluciones  a  sus perentorias necesidades,  elevan el pendón del conflicto.

 La inusitada  efervescencia de la Clase media en los primeros meses del 2012, explica un fenómeno que va más allá de la protesta callejera: cuestiona al “proceso de cambio” pues, la promesa de un mejor nivel de vida, ofertada en la campaña electoral del 2009, según esta Clase y movimientos sociales disidentes con el modelo,  es falsa, demagógica.

La mayoría de la población boliviana, no tiene acceso a fuentes de trabajo ni oportunidades, mientras que el avasallamiento de los derechos ciudadanos y de la propiedad privada, ahondan el encono y  la resistencia  contra el sistema oficial.

En algo más de treinta meses, esperando inútilmente  alguna señal positiva del Poder Ejecutivo,  la Clase Media  se cansó de ser víctima al comprobar que  está excluida;  que su espacio vital de clase  peligra por la imposición de un  abstracto “socialismo indígena andino”  con fuertes indicios de racismo intolerable. 

Ante las difíciles circunstancias que le agreden: crisis económica, crisis energética, crisis de gobernabilidad, crisis en seguridad ciudadana,  etc.,  duda del sistema político que lejos de ofrecerle  alternativas de mejor vida, le condena. En consecuencia, la rebelión de la Clase Media, no es producto de la oposición;  tampoco es proyecto de políticos que por su propia voluntad, dejaron el país; ni obedece a consignas externas. Sencillamente, es reacción natural de Clase al sentirse ultrajada. Gana escenarios de lucha política, porque no está dispuesta a perecer.


El descontento
y sus causas

Después que la Clase Media votara por el cambio, apoyando al candidato del Movimiento Al Socialismo (MAS), la corriente indigenista ganadora de las elecciones generales del 2009, en su acto político de inauguración  ocupó Tiwanaku, centro arqueológico precolombino, en cuyas ruinas el nuevo mandatario constitucional Evo Morales, fue aclamado como el primer presidente indígena, imagen que colmó de júbilo y de orgullo  a las comunidades de oriente y occidente.

Entonces, cobró  mayor impulso  la tesis indigenista de recuperar  la identidad nativa, destinada a  traer el pasado milenario al presente,   perdido en el Siglo Diez y seis, cuando España  imperial violentó el estatus comunitario del  indígena, reduciéndolo por siglos al de colono esclavizado.

El siguiente evento,  puso en práctica la Constitución Política del Estado Plurinacional.  La nueva CPE,  anuló en el papel, los  términos  históricos de República Unitaria de Bolivia;  dio paso  tal vez indirectamente,  a interpretaciones radicales sobre autonomías comunitarias, independientes, poseedoras de  territorio  y recursos naturales propios, como  legítima  herencia precolombina.

La bandera tricolor de Bolivia, refutada por encarnar a la República de 1825, fue desplazada   por la “wiphala” ,  emblema  multicolor que representa según sus promotores, a las etnias.

Grupos altiplánicos y selváticos, influidos por esta  visión, mostraron fuerza en las principales ciudades bolivianas,  portando  en sus marchas políticas símbolos  que se creyeron sepultados  desde el fracasado cerco indígena a la ciudad de La Paz, en 1781.

La  exhibición pública y sostenida  de  la simbología nativa,  configuró  en cuestión de semanas, elementos visuales destinados a diferenciar, sin lugar a equívocos,  a la clase campesina-indígena,  favorita del poder político, de las demás clases  sociales y en esencia, de la Clase Media.

Racismo

En su desarrollo, el proceso de cambio despertó  el  racismo a la inversa que flotaba desde antaño. Movimientos sociales de tendencia extrema, identificados racialmente, enfocaron  su resentimiento y revancha contra la Clase Media culpable de la postergación  indígena, según ideólogos que exaltan la vida comunitaria del pasado.

He aquí pequeños ejemplos. En la ciudad de La Paz, algunos transportistas de raíces indígenas, no recogen a pasajeros “kharas”, es decir, no indígenas, mientras que en la Administración Pública,  funcionarios del partido gobernante, son indiferentes a los requerimientos de los citadinos. Para ellos, cualquier miembro de la Clase Media es invisible; no existe.

Cabe mencionar a  un grupo de mujeres del Valle de Cochabamba, que  exigió al Organo Ejecutivo,  cambiar el nombre de la Plaza Murillo,  La Paz,  por el de un héroe indígena. Argumentaban que  Pedro Murillo,  en el cerco de Tupac Katari a la ciudad de La Paz, en 1781, combatió en el ejército realista español contra los indios sublevados.

Años más tarde, Pedro Domingo Murillo,  comandó la Revolución del 16 de Julio de 1809, el primer grito independentista.  Fue colgado  por las fuerzas españolas. Murillo, es un símbolo paceño. Habitantes y estantes de La Paz cerraron filas contra la descomunal  exigencia, cercana  a las posturas fascistas de la Segunda Guerra Mundial.

Como supuesto éxito de la economía oficial, un alto miembro del  gobierno afirmó que medio millón de ciudadanos bolivianos, pasó a engrosar  la Clase Media.

Olvidó que cientos y miles  de personas  sin acceso a nuevos empleos y excluidos de los proyectos oficiales,  tienen un pie en las filas del proletariado. La Clase Media, por la exclusión, está al borde de la miseria.

¿Cuántos profesionales egresados de las universidades,  para ganar  un pobre salario trabajan en vehículos del  servicio público? ¿Cuántos profesionales, salen a probar suerte en los países vecinos y del mundo, dejando a su familia en el desamparo? 

Propiedad  privada

Desde la dimisión del gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada en Octubre 2003, hasta  la fecha, es constante la ocupación de tierras privadas y de minas productivas, por movimientos sociales y grupos indígenas.

Vayan algunos ejemplos: Avasallamiento de las tierras del Ingenio Azucarero “San Aurelio; avasallamiento de tierras productivas de la Asociación de Productos Oleaginosos y Trigo (ANAPO), Santa Cruz. Avasallamiento y entrega de tierras a comunidades guaraníes en el Chaco. Avasallamiento de 400 hectáreas en el departamento de Oruro. Avasallamiento de tierras por comuneros  de Potosí y de Oruro, en enfrentamiento de límites y recursos naturales. Avasallamiento de tierras pertenecientes a un grupo católico, en el departamento de Cochabamba. Avasallamiento y “toma” de terrenos ubicados en la región Sur de La Paz, por comunidades que proclaman su derecho ancestral sobre ellos, etc., etc.

A las ocupaciones periódicas de tierras privadas, se agrega la creciente inseguridad de la Clase Media, temerosa de que sean enajenadas sus  viviendas y casas. De acuerdo a un proyecto de Ley, la propiedad privada urbana  podría ser incautada. En esa hipotética  situación, se estaría vulnerando el Artículo 57 de la CPE que a la letra dice: “La propiedad inmueble urbana no está sujeta a reversión”.

Otras causas

Entre las causas que han colmado a La Clase Media, está el monopolio político del Organo Ejecutivo, sobre la Asamblea Legislativa  y el Organo Judicial. En la práctica, no hay separación de los tres poderes, por lo tanto, la institucionalidad del país es débil.  

El trato coercitivo contra periodistas y medios de comunicación, impacta  en la Clase Media, así como la  imagen distorsionada del ciudadano boliviano en el extranjero, calificado de  narcotraficante por la “cocaína boliviana” que se produciría en áreas del país.

El manejo displicente y contradictorio de las Relaciones Internacionales por la Cancillería del Estado Plurinacional; el fracaso de la política marítima boliviana, son factores que, tocan la sensibilidad de la Clase y de su intelectualidad.

También cuenta  el impedimento ideológico que rechaza la apertura de mercados para la exportación de productos nacionales. Causas -- sin mencionar otras de dominio público-- que impulsan a los sectores de la Clase Media, a buscar alternativas.

El conflicto social

En este marco, la situación nacional es de crisis permanente. En tres años del “proceso” la correlación de fuerzas va cambiando negativamente para el Movimiento Al Socialismo (MAS).

Sectores y grupos de gran fortaleza social, abandonaron prácticamente al MAS, desde diciembre 2010, cuando el gobierno de Evo Morales decretó el alza de hidrocarburos: la Central Obrera Boliviana (COB), el Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qllasuyo (CONAMAQ),  federaciones de juntas vecinales de las ciudades de La Paz y El Alto, fabriles, pequeños comerciantes, empleados públicos, gente sin empleo; grupos campesinos de todo el país, etc., optaron por alejarse de la corriente indigenista.

La crisis ejerció fuerte influencia en organizaciones populares, alejadas de la sede de gobierno. La Confederación Indígena del Oriente Boliviano (CIDOB), comunidades del Territorio Indígena Parque Isiboro-Sécure (TIPNIS), y pueblos guaraníes, rompieron lanzas con el gobierno, para impedir que una carretera penetre el área de reserva ecológica.

El balance político de la Octava Marcha del TIPNIS, que recorrió más de 600 kilómetros a pie, desde Trinidad, Beni, hasta la ciudad de La Paz, venciendo dificultades climáticas y bloqueos de  “interculturales” el año 2011, es desastroso para el gobierno.  Sacó a flote, como lo dijo un comentarista indígena refiriéndose a una de las prácticas coloniales, el enfrentamiento de “indios contra indios”.

El estado de crisis social, activo el año pasado  y los primeros meses del 2012, alarma al país: Los conflictos económicos y de clase, se agudizan. En ciertos casos, se repiten con mayor gravedad. Tal es la Novena Marcha del TIPNIS, que aglutina el descontento de los departamentos orientales bolivianos, mientras acelera la etapa descendente de la corriente indigenista de la parte occidental de Bolivia.

La vanguardia
de la Clase Media

En este caótico período eclosionó el descontento de la Clase Media, que encontró un grupo esclarecido,  atrayente para las clases sociales en conflicto con el gobierno del Movimiento Al Socialismo: el cuerpo médico del sistema de Salud Pública.

Los médicos asumieron su papel;  colapsaron las calles fortalecidos por el apoyo ciudadano, por la elocuente solidaridad política del Magisterio,  del proletariado y de movimientos  indígenas disidentes.

Sería  difícil entender, cómo y por qué un núcleo de profesionales médicos, rebasa sus límites físicos y se transforma en cabeza visible y aglutinante del descontento nacional en el que participan diferentes clases sociales, si no aceptaríamos que tras la huelga médica esta la presencia política y social de la Clase Media.

La huelga ---contra el horario de ocho horas de trabajo; contra la crisis de medios y estructuras obsoletas de los hospitales y clínicas del Estado-- se transformó, por su discurso y su enfoque social, en máxima trinchera contra la política oficial.

De hecho, esta transformación influirá en la  Novena Marcha Indígena del TIPNIS, porque  enlaza y aglutina intereses comunes del descontento y del reclamo de los dos polos nacionales: occidente y oriente de Bolivia.

El gobierno, parece no haber comprendido la aguda situación;  tampoco habría asumido que en  nuestro país, ya no están sueltos  y divididos los conflictos. La realidad es que hay uno solo, gigantesco, unido, capaz de generar una situación diferente y antagónica a la que vivimos quienes presenciamos el inicio de la rebelión de la Clase Media. (clovisdiaz@yahoo.es).


miércoles, mayo 02, 2012

Investigación: MARCHA DEL TIPNIS Y POSIBLE CRISIS DEL ESTADO PLURINACIONAL


I
Por Clovis Díaz

La Paz , Bolivia, Abril 2012.- El gobierno, a “sugerencia de la Organización de Naciones Unidas” postergaría por unos meses, la Consulta Previa sobre la construcción del tercer tramo carretero de la vía interdepartamental Villa Tunari, San Ignacio de Moxos.

El Ministro de Gobierno Carlos Romero, citó una sugerencia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Bolivia, Denis Racicot, en sentido de que sería beneficioso para ambas partes en conflicto, postergar la Consulta Previa.

CAMBIO DE OPINION

Días antes, el primer mandatario luego de un vuelo en helicóptero por la zona involucrada, dijo estar convencido de que la carretera, ante los obstáculos naturales existentes, debería  atravesar el centro del Territorio Indígena Parque Isiboro-Sécure (TIPNIS), única vía posible. Hacían coro ministros, operadores políticos y aliados.

Portavoces del MAS  sustentaban que el gobierno había logrado “consenso en 32 comunidades de las 68 que pueblan el TIPNIS y que, por lo tanto,  la Ley de Consulta se realizará a partir del 10 de mayo” llueve o truene.

Hasta entonces, la estrategia oficial sobre la necesidad perentoria de la Consulta Previa, tanto en la bancada del Movimiento Al Socialismo, como en el gabinete de ministros, había logrado imponer un sólido mensaje de conducta contra el TIPNIS;  reflejado en los medios de comunicación de nuestro país.

Sin embargo, al finalizar la tercera semana de abril, el gobierno dio  un giro de 360 grados, basándose en las declaraciones del funcionario de la ONU Denis Racicot y de inmediato, abandonó su plan destinado a una Consulta Previa.

Entonces,  puso manos a la obra para modificar la Ley 222  y postergar la Consulta  “por unos meses”. ¿Qué había sucedido?

CRISIS DE GOBERNABILIDAD

A mi juicio, más que las declaraciones de Denis Racicot, el fondo radicaría en la situación de crisis social que afecta directamente a la gobernabilidad y a la misma imagen del primer mandatario del Estado Plurinacional.

El sábado 21 de abril del presente año, más de 4 mil trabajadores de Salud, entre ellos médicos, paramédicos, personal de servicio y administrativo, continuaban en huelga, apoyados por cientos de universitarios de la ciudad de El Alto y por una huelga de maestros que pedía un nuevo gobierno capaz de solucionar el problema económico  y social de todos los sectores laborales.

Hacían causa común, la  Central Obrera Boliviana; Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qllasuyo (CONAMAQ); pueblos selváticos afiliados a la Confederación Indígena del Oriente Boliviano (CIDOB); federaciones y sindicatos de choferes, exigiendo elevar las tarifas de transporte público; juntas vecinales, un grupo de víctimas de las dictaduras, disidentes campesinos del MAS; etc.

Este inmenso y compacto  bloque elevaba la temperatura política y disociaba el curso normal de la vida en las principales ciudades del país. Estaba integrado por grandes grupos de trabajadores del campo y la ciudad  descontentos. Exigía aumento de salarios de acuerdo al costo de vida. Otros movimientos participaban  reclamando nuevos empleos, como lo había prometido el presidente Evo Morales,  en la campaña electoral del 2009.

El caudal de paros, bloqueos de carreteras nacionales e internacionales; huelgas de hambre del Magisterio, caracterizadas por una “huelga de hambre seca”, es decir, sin probar ni un bocado de agua; paralización casi total del servicio médico, impactó  directamente  en la gobernabilidad del país; en el proyecto de reelección presidencial,  en la estabilidad no sólo del gobierno, sino también en las fricciones internas del Movimiento Al Socialismo.


ENFOQUE UNIPOLAR

Desde los primeros meses del 2011 etapa en que los pobladores del TIPNIS en su Octava Marcha llegaron hasta La Paz; hasta el mes de abril del 2012 cuando las comunidades del área amazónica, anunciaron la Novena Marcha del TIPNIS, el gobierno y todo su aparato político, habría enfocado el problema del TIPNIS como el único existente en el país.

Esta falsa percepción, generó por supuesto, una falsa idea de que fuera del TIPNIS, no había de qué preocuparse y de que Bolivia estaba contenta con el cambio…

El enfoque unipolar sobre el TIPNIS, impidió ver al oficialismo la existencia de agudos problemas económicos, sociales y hasta de política internacional. Es increíble, como un gobierno nacional, descuidó a lo largo de doce meses numerosos asuntos vitales para el país y sólo tuvo en mente, el TIPNIS.

Hoy, la situación de crisis social es tremenda. Pasa su factura a los conductores políticos que habrían  despertado a una realidad distinta a la pintada por sus analistas e ideólogos.

LA NOVENA MARCHA DEL TIPNIS

¿Por qué, ahora el oficialismo levanta bandera blanca en el tema de la Consulta Previa? Al parecer, por el temor de que, la Novena Marcha del TIPNIS; aglutine a su paso y en particular en la ciudad de La Paz, a todos los sectores y movimientos sociales descontentos contra el gobierno de Evo Morales.

El 25 de abril, día de inicio de la Novena Marcha, se ha convertido en un símbolo de gran atracción por su poder de convocatoria y por constituir un vehículo de aglutinamiento del descontento.

No en vano, la oposición legislativa  y los movimientos sociales (otrora aliados del oficialismo),  mantienen la efervescencia del conflicto hasta la partida de la Novena Marcha del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro-Sécure (TIPNIS).

Tras la movilización del TIPNIS y de los sectores descontentos, parece flotar el cuestionamiento de que si aún es válida la representatividad del presidente Evo Morales Ayma pues, si los grupos que le dieron su voto el 2009 para elegirlo, hoy le retiran apoyo político, ya no estaría gobernando en nombre de esa multitud.

La Novena Marcha del TIPNIS, es conceptuada  por fuerzas descontentas que pertenecieron al MAS y por otras tendencias políticas de oposición,  como una oportunidad y alternativa  para establecer un cambio de proceso.

TRES FACETAS

En nuestra investigación sobre el fenómeno social y la Novena Marcha del TIPNIS, establecemos tres posibles facetas en pleno desarrollo: 1.- Apoyar en niveles populares, la realización de la Novena Marcha del TIPNIS; 2.-  Postergar las  propuestas del oficialismo  en el conflicto del TIPNIS y; 3.- Aglutinar a todos los sectores y clases sociales enfrentados al gobierno.

En nuestra investigación, si bien el conflicto del TIPNIS constituye el enfoque central, no desconocemos la situación caótica reinante en la ciudad de La Paz que, a su vez, retroalimenta las aspiraciones de los grupos descontentos.

CRISIS DEL ESTADO PLURINACIONAL

A partir de fines de diciembre del 2010, cuando el gobierno decretó el alza de hidrocarburos y hasta abril del 2012, cuando se anunció la Novena Marcha del TIPNIS; es notorio un hecho elocuente: el fenómeno de la crisis del Estado Plurinacional.

No son casuales las disputas internas del Movimiento Al Socialismo, por controlar el poder político. La crecente debilidad ideológica del MAS, contribuye al deterioro del Estado Plurinacional.

Un factor digno de mencionar por su importancia social, es el distanciamiento y deserción de grandes grupos sociales con el gobierno del MAS; en consecuencia, cercanos o potables para la oposición. 

Otros grupos están apartados del “proceso de cambio”, que apoyaron decididamente con su fuerza y su voto al gobierno actual. Pertenecen al área occidental y a la zona del oriente como son respectivamente,  “Los Ponchos Rojos” y comunidades que pueblan el TIPNIS bajo el mandato de la Confederación Indígena del Oriente Boliviano (CIDOB).

También es oportuno, citar a gran parte de la clase media que votó por el cambio en las elecciones del 2009. Hoy, esta clase social, rechaza una posible reelección  presidencial y la continuidad del proceso.

En suma, estos factores, entre otros, van configurando las futuras condiciones de una ruptura con el Estado Plurinacional que difícilmente podría sobrevivir, al retiro de las principales fuerzas sociales que hicieron posible su edificación. (clovisdiaz@yahoo.es).